muelas del juicio
Históricamente se sabe que los primeros hombres tenían mandíbulas más largas y con más espacio para un mayor número de molares que le facilitaran la masticación. En la actualidad, con la evolución y los cambios en la dieta, las muelas del juicio han perdido su utilidad; y debido a que la mandíbula es más corta, es común la falta de espacio al momento de su erupción, lo que puede ocasionar episodios de dolor entre otras molestias.
Este problema es uno de los motivos de consulta dental más comunes, por el intenso dolor que ocasionan las muelas del juicio y que, de no tratarse, puede incluso durar años.
Las muelas del juicio o terceros molares son los últimos molares en erupcionar y aparecen entre los 17 y 25 años. Son llamadas así porque aparecen en una edad en que la persona ya alcanzó un mayor juicio o raciocinio.
La mayoría de las personas tiene cuatro muelas del juicio en la parte posterior de la boca, dos en el maxilar y dos en la mandíbula.
Las muelas del juicio sanas y que han erupcionado en posición normal no ocasionan problemas.
El dolor se produce cuando, debido a la falta de espacio en la boca, estas molares quedan retenidas dentro del hueso o la encía, y provocan presión e inflamación. En otros casos las muelas del juicio pueden erupcionar de manera incompleta o parcial, facilitando la acumulación de placa bacteriana lo que ocasiona inflamación e infección en la encía que las rodea.
El signo principal es el dolor, pero existen otras señales que nos pueden advertir problemas en las muelas del juicio:
Existen diversos fármacos de venta libre que, en las dosis recomendadas, sirven para el alivio inmediato de cualquier tipo de dolor dental. Entre ellos están los analgésicos y los antiinflamatorios no esteroideos como el ibuprofeno o el paracetamol, que son muy eficaces para el dolor.
Sin embargo, cualquier medicamento debe estar prescrito por un profesional cualificado que especifique las dosis y la frecuencia para evitar problemas.
En algunos casos, el dolor de muelas del juicio puede resolverse solo y en otros casos necesitar de un tratamiento e intervención profesional. Mientras tanto, existen opciones inmediatas pero momentáneas que pueden ayudar a controlar el dolor desde casa.
En la mayoría de casos, el profesional recomendará la extracción dental como tratamiento definitivo. Excepto cuando la posición de las raíces no lo permita. En todo caso, será siempre el cirujano dentista quien evalúe el riesgo-beneficio de este tratamiento.
La extracción de las muelas del juicio es un procedimiento ambulatorio, es decir que se realiza en la consulta dental y tiene una duración aproximada de 1 hora.
Generalmente se realiza bajo anestesia local, lo cual evita que haya dolor pero el paciente permanece despierto durante la cirugía.
Posteriormente, el cirujano oral procederá a realizar la extracción de la pieza dental entera o en algunos casos podría ser necesario abrir la encía y cortar la pieza en trozos para facilitar su extracción. Al terminar, es probable que sea necesario suturar la zona para ayudar a que cicatrice.
El período de recuperación postoperatorio es por lo general de 2 a 4 días. Dependiendo de la dificultad del procedimiento, puede sufrir de inflamación y algunas molestias, por ello es importante seguir las instrucciones del profesional y las siguientes pautas:
El crecimiento anormal de las muelas del juicio es impredecible e inevitable, pero una detección temprana puede evitar los síntomas y las molestias posteriores. Por ello es importante visitar al dentista de manera regular y, si de repente notas algún síntoma o experimentas dolor en la zona posterior a los últimos molares, acude inmediatamente a la consulta dental para evitar complicaciones.
En ausencia de complicaciones, el dolor de las muelas del juicio suele durar aproximadamente entre siete y diez días. Durante este tiempo, se pueden utilizar acetaminofeno o ibuprofeno para controlar el dolor. La erupción de las muelas del juicio puede llevar hasta un año o incluso varios años para completarse. Es normal experimentar molestias durante este período.
Durante la erupción de las muelas del juicio, es normal experimentar ciclos de dolor y molestias. La presión ejercida sobre las encías y los dientes adyacentes por la erupción de la muela del juicio puede causar que estos síntomas aparezcan y desaparezcan. Además, el colgajo de encía que cubre la superficie masticatoria de la muela del juicio puede inflamarse y quedar atrapado entre los dientes, lo que provoca un aumento del dolor.
Después de una extracción estándar de las muelas del juicio, el nivel de malestar generalmente mejora después de 3 o 4 días. Entre estos días, el tercer día suele ser el más notable en términos de experimentar incomodidad.
En el caso de las muelas del juicio impactadas, si se produce una infección, se dañan los dientes circundantes o se presentan otros problemas dentales, es posible que notes los siguientes signos o síntomas: encías rojas o inflamadas, encías sensibles o que sangran y dolor en la mandíbula. Estos indicadores sugieren que el dolor de las muelas del juicio debe tomarse en serio.
Aliento Besable: Combatiendo el Mal Aliento en San Valentín El Día de San Valentín es…
Ama tu sonrisa: Opciones de odontología cosmética para el Día de San Valentín San Valentín…
Alivio Natural para el Dolor de Muelas: El Asombroso Rol del Aceite de Menta Si…
Enjuague de Agua Salada para el Dolor de Muela: Guía Completa para Pacientes de Clínica…