Es posible que el dolor de muelas se pueda originar en el nervio, cuando este ha sido afectado, puede ser porque la infección penetró al centro del diente o debido a un traumatismo (lesión) en donde quedó expuesta; independiente de la razón que afecte el nervio, el dolor que puede llegar a sentir una persona es incapacitante y en estos casos, es posible que se deban tomar decisiones extremas como matar el nervio.
Cabe recordar que las infecciones agudas ocurren cuando las bacterias han penetrado la pulpa dental (nervio) y al no controlarse, esta se puede propagar a otros tejidos como vasos sanguíneos, huesos y otros componentes de la cavidad oral. Esto ocurre como resultado de una mala higiene oral y al no intervenir adecuadamente y en el menor tiempo posible puede causar la muerte del nervio del diente, además, de otras complicaciones, puesto que, es posible que la infección se extienda a otros lugares del cuerpo.
Algunos de los síntomas de una infección dental son los siguientes:
Cuando la infección pasa a otros lados del cuerpo los síntomas podrían llegar a ser:
Un diente muerto es aquel al que ya no le llega sangre, por lo tanto, es posible que el primer signo sea la decoloración y posterior a esto viene el dolor y demás síntomas. Es importante diferenciar entre un diente manchado y uno moribundo, por lo tanto, si consume bebidas oscuras o fuma, sus dientes se verán manchados o amarillentos y es una coloración uniforme en todos, pero en los dientes que están muriendo su color es diferente a los demás y se observa mas oscuro un amarillo opaco, café claro, gris e incluso negro. A medida que se va deteriorando el color va cambiando puesto que el daño es más intenso.
Es posible que antes de diagnosticar o iniciar cualquier tipo de tratamiento, su odontólogo realice ciertos exámenes diagnósticos que le permita orientar adecuadamente su manejo. Algunos ejemplos de exámenes diagnósticos pueden ser: radiografías, tomografía computarizada, inspección en el lugar de la infección y/o pruebas térmicas para identificar la sensibilidad de la encía.
El diente está conformado por: la parte externa el esmalte, tres capas principales, seguido de la dentina y en la parte interna conocida como conducto radicular la cual contiene la pulpa que es un tejido blando que contiene nervios, celular de tejido conectivo y vasos sanguíneos, los cuales llenan las raíces del diente. Cada una de estas raíces asegura que el diente esté fijo a la encía y el hueso de la mandíbula.
Cuando el odontólogo determina que no es posible salvar el diente, se puede proceder por dos tipos de tratamientos dentales:
Es un procedimiento comúnmente usado en el manejo de una infección dental que es muy profunda, en donde compromete la pulpa o nervio y busca preservar la pieza dental. Si la pulpa de la raíz está infectada, debe darse tratamiento lo antes posible, ya que, eventualmente puede conducir a la muerte celular.
La endodoncia es un procedimiento que limpia eficazmente la pulpa muerta y deteriorada del diente infectado, hasta la raíz, limpiando completamente el conducto radicular. El odontólogo eliminará las bacterias y luego sellará el diente con un empaste dental (material inerte y biocompatible), hasta adentro en la raíz. Se colocarán una corona provisional o permanente en el diente para evitar que ocurran problemas en el futuro. Este procedimiento deja el diente original en su lugar para ayudar a mantener la integridad de la mandíbula. Y es el preferido por los odontólogos para salvar el diente y conservar la estética dental.
Cuando no es posible restaurar el diente, dado que, está muy dañado o cuando no se puede restaurar, es posible que el médico recomiende la extracción del diente que ya está muerto. Este procedimiento consiste en la extracción de la pieza dental por parte del odontólogo o especialista. Es posible que posterior a la extracción el odontólogo le sugiere reemplazar el diente con un implante, dentadura postiza o puente, para mejorar la estética dental y evitar movimientos de los dientes. Para este procedimiento se requiere la aplicación de anestesia, en el lugar del dolor, con el fin de evitar que sea muy doloroso.
Estas dos formas son las más comunes para sentir alivio del dolor y matar el nervio de un diente, así eliminar el dolor de muelas, que a veces puede llegar a ser tormentoso. Los demás tratamientos o procedimientos ayudan a mejorar los síntomas y alivian el dolor de forma temporal mientras mejoran las condiciones, como, por ejemplo, en una infección.
Existen diferentes tratamientos para el dolor de muelas dentro de la medicina convencional y la medicina natural. Cualquiera que sea el método es posible que nos alivie el dolor, pero la diferencia va a radicar en la intensidad el dolor el tiempo que llevemos con este y el factor que desencadena el dolor, puesto que, la potencia o dosis que debemos aplicar o consumir dependerá de esto.
Recuerde que, ante cualquier signo de fiebre, dificultad para respirar, tragar o encías rojas, se recomienda asistencia de urgencia odontológica o médica.
Se puede manejar el dolor mientras es revisado por un profesional de la salud, con algunas de las siguientes sugerencias:
Para evitar estas situaciones desfavorables para su salud oral le recomendamos:
Si tiene alguna pregunta sobre este u otros temas, puede contactarnos en Channel Island Family Dental así como nuestra página en facebook. Esperamos su visita y haremos un diagnóstico oportuno. Nuestros dentistas en Oxnard, Santa Paula, Ventura, NewBury Park y Port Hueneme podrán orientarlo hacia el mejor tratamiento para cuidar su salud y devolverle su mejor sonrisa.
6. Buffa V. Nervio dental y dolor de muelas: causas y tratamientos. Mejor con Salud (internet). Publicado en May 14, 2022, consultado en octubre 10, 2022). Disponible en: https://mejorconsalud.as.com/nervio-dental-dolor-muelas/
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