¿Qué son las infecciones del conducto radicular? (6 síntomas definitivos)

infecciones del conducto radicular

Last Updated on: 4th diciembre 2024, 11:49 am

Las infecciones del conducto radicular son una afección frecuente en todo el mundo; son la principal causa de dolor y el motivo de urgencia odontológica más recurrente. En este artículo, te contamos lo que necesitas saber sobre las infecciones del conducto radicular y su tratamiento.

 

¿Cómo están conformados los dientes?

Los dientes son órganos que se componen de varias capas de tejido duro (esmalte, dentina y cemento) que, en su interior, albergan la pulpa dental. La pulpa dental es el órgano que aporta vitalidad al diente, llevando suministro de sangre e inervación, la cuál transmite señales de dolor ante la presencia de alguna agresión, como la caries, fracturas o traumatismos. La pulpa dental se encuentra ubicada tanto en la corona de los dientes como en las raíces. Cada raíz cuenta con al menos un conducto o canal, donde se aloja la pulpa dental.

 

¿Qué son las infecciones del conducto radicular?

root canal infection

El conducto radicular originalmente es un espacio estéril, por lo que, al ser afectado por bacterias, se considera que se encuentra infectado. Los conductos radiculares pueden infectarse por varios motivos:

    1. Caries dental: Cuando la higiene es deficiente, las bacterias de alimentan de los restos de comida que quedan en la boca y producen un ácido que ocasiona agujeros en los dientes. Si estos agujeros llegan hasta la pulpa dental, el conducto se infecta, la pulpa se inflama y por lo general, se produce dolor intenso.
    2. Fracturas dentales: Si se pierde parte de la estructura dental y se expone la pulpa dental, es posible que se infecte el conducto radicular.
    3. Traumatismo: Cuando los dientes sufren golpes, aún cuando no se fracturen, pueden desconectarse del suministro sanguíneo, causando una necrosis de la pulpa. Al descomponerse este tejido al interior del diente, se produce una infección.

 

¿Cuáles son los signos y síntomas de la infección de los conductos radiculares?

Si hay infección, esta podría llegar a propagarse a la raíz por medio de los conductos radiculares. Si esta infección no es tratada a tiempo, ocasionalmente podría provocar un absceso, es decir, un área inflamada rellena de pus que puede afectar los tejidos vecinos del diente.

Ante la presencia de una infección en los conductos radiculares pueden presentarse los siguientes síntomas:

    • Dolor leve, este tipo de dolor se caracteriza por ser más molesto que doloroso.
    • Dolor intenso e insoportable, espontáneo o al tocar el diente.
    • Secreción de pus.
    • Sensación de calor en la zona afectada.
    • Sensibilidad al tacto o presión.
    • Coloración grisácea en el diente (no siempre).

Adicionalmente, una radiografía permite ver el grado de afectación de la pulpa dental, y en algunos casos, evidenciar si la infección ya ha trascendido al hueso que rodea el diente.

 

¿Qué es una endodoncia?

La endodoncia o el tratamiento de conductos es un procedimiento que consiste en la eliminación de la pulpa dental, dejando el conducto limpio y reduciendo al máximo la presencia de bacterias, con el fin de aliviar del dolor ocasionado por inflamación. Realizar este tratamiento permite resolver la infección sin tener que retirar el diente.

 

¿Cómo se realiza una endodoncia?

El tratamiento de conducto es un procedimiento de rutina que, aunque toma varias sesiones no requiere incapacidad alguna para el paciente. El tratamiento de conducto consta de varias etapas:

    • Examen: El endodoncista realiza evaluación exhaustiva por parte del profesional donde examina tanto clínica como radiográficamente el estado del diente, la cantidad de raíces y si existe o no una infección que compromete los tejidos vecinos del diente y la raíz. Ante infecciones muy severas, es probable que el profesional prescriba antibióticos.
    • Anestesia: Antes de iniciar el tratamiento se aplica anestesia local en el diente al cual se va a someter el tratamiento.
    • Aislamiento: Antes de iniciar el procedimiento, el odontólogo coloca una tela de caucho que aísla el diente del resto de la boca. Este aislamiento, protege al resto de la boca del desinfectante que se aplica al interior del conducto, evita accidentes con elementos pequeños que podrían caer al interior de la vida aérea e impide la entrada de más bacterias de la boca al conducto.
    • Apertura: Cuando el dolor ha pasado, el odontólogo utiliza una fresa para retirar la caries y abrir el espacio donde se encuentra la pulpa dental y la infección.
    • Pulpectomía y desinfección: Cuando ya se expone la pulpa, se extrae el tejido infectado con ayuda de instrumentos diminutos parecidos a agujas, el conducto se lava, se limpia y se seca, en algunos casos la cavidad que queda se deja con medicamentos para ayudar a sanar la infección o para permitir drenar el pus. En una próxima cita, estos medicamentos son retirados. Entre cita y cita, el odontólogo coloca una restauración temporal para proteger el interior del diente. Es posible que se requiera la toma de una o varias radiografías durante este procedimiento.
    • Obturación o selle: Una vez que el conducto se encuentra limpio y seco, se sella su interior con cemente y un material llamado gutapercha, similar al caucho. Estos materiales son biocompatibles, es decir, no generan reacciones con los tejidos. Posteriormente, el diente deberá recibir una restauración permanente o una corona.

 

¿Qué esperar después de una endodoncia?

    1. Es posible experimentar algo de sensibilidad por la instrumentación o la administración del anestésico. Este tipo de sintomatología es transitorio y no suele durar más de un par de días. En ocasiones el profesional prescribe analgésicos para el control del dolor y la inflamación.
    2. Al eliminar la pulpa dental, el diente queda un poco más frágil y susceptible a caries y fracturas, pues la estructura dental pierde humedad y el diente ya no siente dolor en su interior que lo proteja de agresiones externas. Evite morder cosas demasiado duras.
    3. Después de la endodoncia es indispensable sellar de manera permanente la entrada a los conductos con una restauración definitiva en resina o una corona dental, ya que, si esto no se hace, se perderá la limpieza exhaustiva que se ha hecho y se puede presentar nuevamente una infección. Además, esto ayuda a evitar fracturas.

 

¿Cómo se evitan las infecciones radiculares?

root-canal-operation

Las infecciones radiculares pueden prevenirse de la siguiente manera:

    • Higiene oral adecuada, mínimo tres veces al día con el uso de los elementos necesarios, crema dental, cepillo de dientes, seda dental y enjuague bucal.
    • Visita al odontólogo mínimo dos veces al año, las limpiezas dentales profesionales ayudan al acumulo de placa y al desarrollo de enfermedades como la caries dental.

Es importante asistir a las consultas de control con el especialista; el tratamiento de conductos es una buena opción para evitar la pérdida dental, pero si no se mantiene controlado o no realiza una adecuada limpieza puede presentarse caries nuevamente afectando ya no la pulpa del diente si no los tejidos vecinos, lo que puede llevar a la pérdida del diente o infecciones más graves que podrían incluso comprometer la vida. Consulte con su odontólogo si después del tratamiento de endodoncia presenta dolor intenso o hinchazón de la zona.

 

Preguntas frecuentes

La infección posterior a una endodoncia es poco común, pero puede suceder. Y cuando sucede, puede manifestarse días, semanas e incluso años después. Sin importar cuánto tiempo haya transcurrido desde la endodoncia, si presenta alguno de los síntomas siguientes, le recomendamos que se comunique con su dentista para programar una cita.

Solicite atención dental de emergencia.

Las infecciones pueden propagarse rápidamente y ocasionar daños graves si no se tratan. En la mayoría de los casos, su dentista podrá atenderlo el mismo día en que llame para programar una cita, y tomará todas las medidas necesarias para diagnosticar y tratar la infección lo más pronto posible.

Un tratamiento rápido es esencial, ya que una infección en el conducto radicular puede extenderse rápidamente a otras áreas del diente y las encías. En ciertos casos, puede incluso extenderse mucho más allá del diente, causando infecciones en el rostro, la mandíbula e incluso, lo que es aún más grave, podría ingresar al torrente sanguíneo.

Lamentablemente, los antibióticos pueden tener dificultades para curar un absceso si la infección ha llegado a los vasos sanguíneos en el interior de la raíz, la porción anatómica del diente que está cubierta por cemento y se encuentra en la cavidad donde se une mediante el aparato periodontal; esta es la porción radicular del diente.

 

Contáctanos

Si tiene alguna pregunta sobre este u otros temas, puede contactarnos en Channel Island Family Dental así como nuestra página en facebook. Esperamos su visita y haremos un diagnóstico oportuno. Nuestros dentistas en Oxnard, Santa Paula, Ventura, NewBury Park y Port Hueneme podrán orientarlo hacia el mejor tratamiento para cuidar su salud y devolverle su mejor sonrisa.

 

Bibliografía

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