Enfermedades de las encías: 6 signos y síntomas

La salud bucodental es un componente esencial de nuestra salud general. A pesar de su importancia, las enfermedades bucodentales, especialmente las relacionadas con las encías, son frecuentes en poblaciones de todas las edades. La enfermedad de las encías, también conocida como enfermedad periodontal, es uno de los problemas bucodentales más prevalentes en la sociedad actual. Esta afección puede variar en gravedad, desde una simple inflamación gingival hasta una enfermedad avanzada que afecta el tejido que sostiene los dientes. Dada su relevancia, es fundamental contar con un entendimiento completo de sus causas, síntomas y tratamientos.

En este artículo, nos sumergimos profundamente en la enfermedad de las encías, sus síntomas, factores de riesgo, y cómo la información actualizada puede ayudar en su prevención y tratamiento. ¡Vamos a descubrirlo!

 

Contexto Global y Actualidad

La Organización Mundial de la Salud ha señalado que, en la última década, las enfermedades bucodentales han incrementado su prevalencia, afectando a aproximadamente 3.5 mil millones de personas. Los avances en investigaciones y tecnologías dentales han permitido una mejor comprensión y tratamiento, pero la prevención sigue siendo esencial Esta carga de enfermedad puede resultar costosa y, en muchos países, no se encuentra cubierta por la sanidad pública.

 

Prevalencia en EE.UU

La situación en Estados Unidos es alarmante. El Instituto Nacional de Investigaciones Dentales y Craneofaciales sugiere que muchos adultos padecen de enfermedades de encías. Estas enfermedades varían desde simples inflamaciones hasta afecciones graves que pueden provocar la pérdida de dientes.

 

¿Qué son las enfermedades de las encías?

La enfermedad de las encías, o periodontitis, se refiere a la inflamación e infección que afecta los tejidos que rodean y sostienen los dientes. Esta se manifiesta cuando las bacterias en la placa (una película pegajosa que se forma en los dientes) producen sustancias que inflaman e irritan las encías. Si esta situación persiste, las encías pueden alejarse de los dientes, formando bolsas llenas de bacterias que infectan aún más el tejido periodontal.

 

Gingivitis y periodontitis

Existen distintas etapas en la evolución de esta enfermedad, siendo la gingivitis la más común y tratable. Pero sin atención adecuada, puede evolucionar a periodontitis, una etapa con consecuencias más severas y, lamentablemente, irreversible.

La enfermedad de las encías tiene dos presentaciones principales: la gingivitis y la periodontitis. Mientras que la gingivitis es una infección leve de las encías, la periodontitis es una versión avanzada y más dañina. Si la gingivitis no se trata, puede progresar a periodontitis, lo que lleva a daños más graves y pérdida dental.

Enfermedad de las Encías y Salud General

Recientes investigaciones han demostrado que la enfermedad de las encías puede estar relacionada con problemas cardíacos, diabetes y partos prematuros. Las bacterias presentes en las encías inflamadas pueden ingresar al torrente sanguíneo, afectando otros órganos y sistemas. Esta relación bidireccional implica que, por un lado, tener una enfermedad periodontal puede aumentar el riesgo de padecer otras enfermedades y, por otro, ciertas enfermedades sistémicas pueden incrementar la probabilidad de desarrollar problemas en las encías.

 

Factores de riesgo

Ciertos individuos tienen más probabilidad de desarrollar enfermedad de las encías debido a sus hábitos, genética o condiciones médicas. Estos incluyen fumadores, personas con altos niveles de estrés y aquellos con antecedentes familiares de enfermedad de encías.

 

Factores internos y externos: Desde cambios hormonales hasta medicamentos, varios factores pueden aumentar el riesgo de enfermedad de las encías. Además, enfermedades que comprometen el sistema inmunológico, como el VIH o el lupus, pueden aumentar la susceptibilidad a infecciones bucales.

Igualmente, la acumulación de placa es el principal causante de la enfermedad de las encías, pero hay otros factores de riesgo que la propician:

• • Higiene bucal inadecuada: El no cepillarse ni usar hilo dental regularmente aumenta el riesgo.
  • Tabaquismo: Es uno de los principales factores de desarrollo de la enfermedad de las encías.
  • Cambios hormonales: Embarazo, menstruación, pubertad y menopausia pueden hacer que las encías sean más sensibles.
  • Enfermedades sistémicas: La diabetes, enfermedades cardíacas, y cáncer pueden aumentar la probabilidad de inflamación gingival.
  • Medicamentos: Algunos reducen el flujo salival, disminuyendo la protección natural contra las bacterias.

 

Hábitos y enfermedades

Las personas con diabetes, enfermedades cardíacas o trastornos inmunológicos también tienen un riesgo elevado. La mala higiene oral, la falta de visitas al dentista y tener dientes torcidos o mal alineados son otros factores a considerar. Si está interesado en aprender sobre los dientes torcidos en los bebés, no dude en consultar nuestro artículo aquí.

 

Síntomas Comunes de la Enfermedad de las Encías

Identificar la enfermedad de las encías a tiempo es crucial para un tratamiento efectivo. Estos son los síntomas a considerar:

• • Encías rojas, inflamadas o sangrantes.
  • Retracción gingival, donde las encías se alejan de los dientes.
  • Dientes flojos.
  • Pus entre dientes y encías.
  • Dolor al masticar.
  • Sensibilidad dental.

Es crucial estar atento a los primeros síntomas: encías rojas, inflamadas, sangrado durante el cepillado, mal aliento persistente, retracción de las encías y sensibilidad dental. Reconocer estos signos temprano puede ser la clave para un tratamiento exitoso.

La avanzada enfermedad de las encías puede llevar a encías retraídas, dientes sensibles y, eventualmente, a dientes sueltos o móviles. Es esencial entender cómo esto afecta nuestra salud bucal general y actuar en consecuencia.

 

Rol de la placa y la higiene dental

La placa dental juega un papel central en la enfermedad de las encías. Esta capa pegajosa, repleta de bacterias, se acumula en los dientes y, si no se elimina, puede irritar las encías. La higiene oral adecuada es, por tanto, esencial para prevenir su formación y acumulación.

 

Tratamiento y diagnóstico de la Enfermedad de las Encías

El diagnóstico temprano de la enfermedad de las encías es clave. Gracias a la tecnología actual, contamos con herramientas como radiografías digitales y pruebas genéticas que pueden identificar predisposiciones a la enfermedad y detectarla en etapas iniciales.

Los tratamientos han evolucionado, incluyendo terapias menos invasivas como el curetaje y alisado radicular, la administración localizada de antimicrobianos y, en casos avanzados, terapias regenerativas con materiales biocompatibles. 

Algunos de estos son:

1. 1. Limpieza Profesional: En las primeras etapas de la enfermedad, una limpieza dental realizada por un profesional puede ser suficiente. Este procedimiento elimina la placa y el sarro de la superficie dental y por debajo de la línea de las encías.
   2. Raspado y Alisado Radicular: Se trata de un procedimiento más profundo que la limpieza convencional. El dentista raspa y alisa las raíces de los dientes para eliminar las bacterias y proporcionar una superficie limpia para que las encías se re-adhieran.
   3. Cirugía Periodontal: En casos avanzados, puede ser necesario realizar una cirugía para limpiar las bolsas de infección y remodelar el hueso dañado.
   4. Medicamentos: Existen medicamentos tópicos y orales que pueden ser prescritos para controlar la infección y reducir el tamaño de las bolsas periodontales.
   5. Terapia con láser: Un tratamiento menos invasivo que utiliza luz láser para eliminar el tejido inflamado y dañado.

 

Tratamiento natural y en casa

Para aliviar una infección de las encías, es fundamental seguir una norma no escrita que la mayoría conoce: para preservar la salud oral, es esencial realizar, como mínimo, dos limpiezas dentales al año con un especialista. La acumulación de sarro y placa bacteriana es a menudo la raíz de las infecciones gingivales, y esto requiere intervención profesional.

Además, los remedios caseros y naturales son a menudo altamente efectivos y son incluso recomendados por dentistas. La utilización cotidiana de estos tratamientos hechos en casa puede proporcionar un alivio significativo y duradero.

 

1. Uso de Enjuagues bucales

 

El propósito principal de los enjuagues bucales es luchar contra la placa dental, responsable de enfermedades gingivales como la gingivitis y la periodontitis, según un estudio de la Universidad Complutense de Madrid.

Por ello, uno de los remedios caseros más efectivos para combatir la placa es el uso del colutorio. A continuación, te explicamos cómo prepararlo.

Ingredientes

• • 2 cucharadas de colutorio (30 ml)
  • 1 cucharada de agua (15 ml)
  • Sal (opcional)

Instrucciones

• • Mezcla una pequeña cantidad de colutorio con unas gotas de agua, cuidando que no sea en igual proporción.
  • Para intensificar la mezcla, puedes agregar una pizca de sal.
  • Una vez combinados los ingredientes, realiza gárgaras con la mezcla, idealmente después de cada comida.

 

2. Zumo de Limón

El limón, gracias a sus propiedades antiinflamatorias y antisépticas, puede ser eficaz en el alivio de la gingivitis. Su acidez impide la proliferación de bacterias y equilibra el pH bucal, contribuyendo también a combatir el mal aliento.

Procedimiento:

• • Exprime el jugo de medio limón y mézclalo con una taza de agua tibia.
  • Utiliza esta solución para enjuagar la boca, evitando ingerir.
  • Realiza este enjuague dos veces al día, pero limita su uso a tratamientos específicos y no prolongados, dado que el ácido del limón puede dañar el esmalte dental.

 

3. Infusión de Manzanilla

La manzanilla es reconocida por sus propiedades antiinflamatorias, antisépticas y analgésicas, además de favorecer la curación de las encías inflamadas al estimular la circulación sanguínea y reducir la hinchazón.

Esta hierba también tiene un efecto calmante y desinfectante en las encías inflamadas. Prepara una infusión de manzanilla dejándola reposar durante 5 minutos y úsala para enjuagar tu boca varias veces al día.

 

4. Enjuague Bucal con Aceite de Coco (Técnica de Oil Pulling)

El aceite de coco contiene ácido láurico, útil en la lucha contra bacterias y patógenos. Para combatir o prevenir la inflamación de las encías:

1. 1. 1. Toma una cucharadita de aceite de coco y permite que se disuelva en tu boca.
      2. Mueve el aceite activamente de un lado a otro en la boca, pasándolo entre los dientes, durante cinco a diez minutos. Esto asegura que alcance todas las áreas de los dientes.

Esta técnica, conocida como «oil pulling», es recomendable realizarla diariamente o, como mínimo, dos veces por semana.

 

5. Extracto de Aloe Vera

El aloe vera es conocido por sus propiedades antiinflamatorias, antibacterianas, y su capacidad para calmar y cicatrizar, lo cual es beneficioso en el tratamiento de infecciones de las encías, incluyendo la gingivitis y la periodontitis. Es interesante saber que los dentífricos con aloe vera son efectivos en inhibir el crecimiento de microorganismos en la boca.

Ingredientes

• • Dos hojas de aloe vera.
  • 150 ml de agua.
  • Una cucharadita de miel (opcional).

Instrucciones

• • Extrae la pulpa de aloe vera y mézclala en la licuadora con los demás ingredientes. Puedes añadir más agua para diluir la mezcla si lo prefieres. Guarda la cantidad sobrante en el refrigerador.
  • Utiliza este jugo como enjuague bucal dos veces al día.

 

6. Enjuague de Berro

El berro, comúnmente utilizado en ensaladas, puede ser sorprendentemente eficaz en el tratamiento de infecciones gingivales. Existen tres formas de usarlo para aliviar esta condición:

• • Como extracto para colutorio o gárgaras.}
  • En forma de infusión.
  • Masticando las hojas frescas.

Ingredientes

• • Berro, zarzamora, hierba de San Guillermo y pimpinela menor.
  • Medio litro de agua.

Instrucciones

• • Combina aproximadamente 5 g de cada planta con el agua y hiérvelas durante dos minutos. Filtra la mezcla usando una gasa.
  • Emplea este líquido como enjuague bucal tres veces al día.

 

Prevención de la Enfermedad de las Encías

La enfermedad de las encías es tratable, especialmente en las primeras etapas. La limpieza profesional es fundamental, donde se elimina la placa y el sarro. En casos más avanzados, se podría requerir cirugía periodontal.

Para prevenir la enfermedad de las encías, es esencial:

1. Higiene Oral:

• • Cepillado: Es esencial cepillarse los dientes al menos dos veces al día utilizando una pasta dental con flúor.
  • Uso de hilo dental: Debe usarse diariamente para eliminar los restos de comida y la placa entre los dientes y bajo la línea de las encías.
  • Enjuague bucal: Puede ayudar a reducir la placa y las bacterias.
  • Visitas Dentales Regulares: Acudir al dentista al menos dos veces al año para chequeos y limpiezas profesionales.

2. Dieta Balanceada: La dieta juega un papel fundamental. Consumir alimentos ricos en vitaminas y minerales y limitar el consumo de azúcares y carbohidratos fermentables.  El consumo excesivo de azúcares y alimentos ácidos puede favorecer la aparición de placa bacteriana. Por otro lado, una dieta rica en vitamina C, calcio, antioxidantes y omega-3 puede fortalecer las encías y ayudar en la prevención de la enfermedad periodontal.

3. Evitar el Tabaco: El tabaquismo es un factor de riesgo significativo para el desarrollo de periodontitis.

4. Cuidado en Cambios Hormonales: Las mujeres, especialmente durante el embarazo, la menstruación o la menopausia, deben ser conscientes del aumento de la sensibilidad en las encías y tomar medidas preventivas.

 

Educación y Prevención:

La educación bucal desde edades tempranas es esencial. Escuelas y comunidades están implementando programas educativos para enseñar a los niños la importancia de la higiene bucal. Además, campañas de concientización en medios masivos buscan reforzar la importancia de visitas dentales regulares y buenos hábitos en adultos.

 

Conclusión

La enfermedad de las encías es un problema de salud bucal grave pero prevenible. Con la adhesión a buenas prácticas de higiene oral y la búsqueda de atención dental regular, es posible mantener las encías sanas y prevenir complicaciones asociadas con esta enfermedad. Es esencial actuar con rapidez ante los primeros síntomas y seguir las recomendaciones del dentista para asegurar una salud bucal óptima.

La enfermedad de las encías es una condición que afecta a millones en todo el mundo. Con la información adecuada, prevención y cuidado oral, podemos protegernos y proteger a nuestros seres queridos. No olvides visitar a tu dentista regularmente y seguir una rutina de higiene oral para mantener una sonrisa sana y radiante.

 

Preguntas frecuentes

 

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Bibliografía

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